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Los elfos son una de las razas humanoides que habitan el Continente. Los elfos conocidos como Aen Seidhe se trasladaron al Continente en sus naves blancas mucho antes que los humanos, pero después que los gnomos y enanos. Los elfos viven mucho más que los humanos y suelen ser muy atractivos.

Los elfos son capaces de aparearse con los humanos (medioelfos) y con las dríadas. Aunque los elfos son increíblemente longevos, solo los elfos jóvenes son fértiles, por lo que las poblaciones élficas tienden a reproducirse a un ritmo más lento que los humanos.[1]

Como otros no humanos, los elfos han sido a menudo perseguidos por los Nordlings. Por eso, muchos elfos se alistaron en la guerrilla scoia'tael con Nilfgaard durante la invasión de los Reinos del Norte por el Imperio. A cambio, el Emperador Emhyr var Emreis les concedió un estado propio en Dol Blathanna y nombró a Enid an Gleanna como su reina.

Los elfos tienen la creencia que fueron creados, a diferencia de los humanos, que evolucionaron. Por este motivo, algunos elfos consideran a los humanos como poco menos que simios sin pelo.

Además de los Aen Seidhe, existe otro grupo de elfos llamados Aen Elle que habitan otro mundo.

Características[]

Apariencia[]

Las características de los elfos incluyen orejas puntiagudas y dientes pequeños e idénticos sin caninos. Los elfos tienden a ser muy altos y delgados, y debido a su longevidad tienen una apariencia juvenil. Los elfos a menudo son considerados atractivos por los humanos. Al igual que los humanos, los elfos eligen usar una variedad de estilos de ropa diferentes, aunque se sabe que los scoia'tael favorecen las pieles y los cueros, particularmente las de las ardillas y otras criaturas que viven en el bosque.[1]

Elfos notables[]

Aen Seidhe

Aen Elle

The Witcher[]

Entrada del diario[]

Después de los gnomos, los elfos son la raza más antigua. Crearon una magnífica civilización y las ciudades humanas más grandes, como Wyzima u Oxenfurt, fueron construidas sobre ruinas élficas. Los elfos son muy duchos en la magia, aunque la suya es diferente a la de los humanos.
Los elfos viven muchos años, pero su reproducción es mucho más lenta que la de los humanos y su periodo reproductivo acaba pronto. Por eso fueron derrotados y perdieron su supremacía en el mundo. Hoy, su raza solo tiene dos enclaves: las montañas Azules, donde los elfos sufren privaciones y están desapareciendo; y Dol Blathanna, el valle de las Flores, gobernado por la hechicera Enid an Gleanna. El valle de las Flores está subordinado a Nilfgaard.
Los elfos son una hermosa raza de larga vida. Tienen orejas puntiagudas, rasgos bien definidos y carecen de caninos. Los elfos son arrogantes y orgullosos y, a lo largo de muchos siglos, han desarrollado una cultura elevada y sofisticada. En la actualidad no quedan muchos, y están en conflicto continuo con la civilización humana. Por eso tantos jóvenes elfos se unen a los comandos scoia'tael para luchar por sus derechos.
Los elfos no hablan de su fe en presencia de los humanos, pues los consideran bárbaros que serían incapaces de entender las sutilezas filosóficas y místicas de su religión. Por otra parte, a la gente no le interesan las creencias élficas. Algunos elfos creen en Dana Meadbh, la diosa madre, que parece ser una faceta de la diosa Melitele.
Los humanos tienen su propia versión de la historia de Lara Dorren y Cregennan de Lod, que difiere considerablemente de la de los elfos. Una elfa y un humano se unieron tras la Conjunción de las Esferas y el advenimiento de los humanos. Los amantes legendarios se convirtieron en un símbolo de la coexistencia pacífica de las dos razas hasta que los elfos, celosos de Lara, mataron a traición al "bárbaro" que se atrevió a relacionarse con su pariente. En la versión humana, Lara es una bruja. La muerte de Cregan desembocó en malévolos y traicioneros planes y, por eso, la hostilidad actual entre las razas es culpa de los elfos.
Los elfos cuentan la historia de Lara Dorren y Cregennan de Lod, una hechicera elfa y un mago humano, los amantes legendarios que unieron a las dos razas. Los elfos dicen que esta relación demostró que era posible la coexistencia pacífica de las razas, hasta que los humanos mataron a traición al mago y desterraron a Lara. Así, según los elfos, la hostilidad, el materialismo y la agresividad de los humanos fueron patentes por vez primera. Estas cualidades "bárbaras" hacen que la coexistencia con los humanos sea imposible, y el final trágico de los amantes desató una guerra que todavía dura.

The Witcher 2: Assassins of Kings[]

Entrada del diario[]

Los elfos, o Aen Seidhe, como se llaman a sí mismos, son gente conocida por su belleza y longevidad. Sus sabios, eruditos y artistas estaban a la vanguardia de sus campos, creando verdaderas e impresionantes obras maestras. Sin embargo, la gloria de esta Raza Antigua se ha ido hace mucho tiempo. Después de una serie de sangrientos conflictos con los humanos, sus ciudades quedaron en la ruina, y los elfos se vieron obligados a retirarse hacia el este, a montañas inaccesibles, o reconocer la dominación humana y aceptar su suerte. Años de guerras, persecución y enemistad mutua crearon una grieta entre nuestras razas. Muchos elfos vieron la posibilidad de obtener la libertad en la última guerra contra Nilfgaard, por lo que tomaron las armas, creando los grupos partisanos de scoia'tael. Aunque lograron asegurar la creación del reino parcialmente independiente de Dol Blathanna, algunos sienten que fueron engañados y aún libran una guerra contra los humanos.

Referencias[]

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