Aridea fue la segunda esposa del conde Fredefalk de Creyden y era madrastra de Renfri.
Biografía[]
Nota: Debido a que la única información sobre Aridea es de segunda mano a través de dos personas que tenían opiniones muy diferentes con respecto a ella, es difícil saber cuál es la verdad y cuál es la información sesgada.
Se desconoce qué le sucedió a la primera esposa de Fredefalk (la madre de Renfri), pero finalmente el conde conoció a Aridea y ambos entablaron una relación romántica antes de casarse y tener hijos juntos. Descrita por Stregobor como una mujer sabia y educada, Aridea también poseía un Espejo de Nehalena, aunque se afirma que en lugar de usarlo para preguntas vanas, Aridea estaba interesada en el destino de su país. Fue informada por el artefacto de que que ella y una gran cantidad de otras personas morirían horriblemente a manos de la querida hija primogénita de Fredefalk, Renfri, y se aseguró de que esta noticia llegara al Consejo, que a su vez envió a Stregobor a investigar.
Después de espiar a la hijastra de Aridea, Stregobor afirmó que esta había torturado a varias criaturas, lastimó severamente a un sirviente y, después de realizar algunas maldiciones, confirmó que Renfri era una mutante, ya que había nacido durante un eclipse. Luego le informó de esto a Aridea porque creía que ella era más inteligente que Fredefalk, ya que este no lo escuchaba porque adoraba a su hija. Con esto, la reina decidió tomar el asunto en sus propias manos y contrató a un matón para llevar a Renfri al bosque y matarla. Sin embargo, el matón decidió que violaría a la chica en su lugar. Renfri lo terminó matando con su broche mientras este estaba ocupado.
Cuatro años después, Aridea le envió un mensaje a Stregobor de que había rastreado a Renfri en Mahakam. Aún con la intención de deshacerse de su hijastra, Aridea también envió numerosos asesinos tras la princesa, pero ninguno de ellos regresó. Luego convocó a Stregobor, pero cuando el hechicero llegó a Creyden, Aridea había sido asesinada con veneno.